¿Por qué es dañino enseñar o promover a menores de edad cambiar de género (sexo)?

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Aparte de los daños físicos, existen daños psicológicos.

Existe una falacia que está haciendo mucho daño en la educación de los niños. Si se enseña en la escuela a los pequeños que la identificación con otro sexo (o género) es algo totalmente normal, éstos al crecer no ejercerán violencia o discriminación contra la comunidad LGTBI+.

Es una falacia porque damos por hecho que ideologizando a los niños y afectando el desarrollo natural de su salud física y mental se acabarán las actitudes de prejuicios, y discriminación. Eso no es sostenible, no hay relación; por el contrario es un daño irreversible a los niños. Incluso podría considerarse un delito.

El problema mayor es que las instituciones que deberían velar por la protección de los niños y adolescentes son las principales promotoras de estas ideologías. Inclusive existe presión en las asambleas y congresos a legislar a favor de ello, basándose erróneamente en que es un “derecho”.

En varios países se fomenta que la aceptación por la diversidad de género y deconstrucción de roles se enseñe en los primeros años de primaria, incluso en el jardín de infantes.

En España, por ejemplo se promueve en los años de infancia1 la lectura de cuentos2 sobre niños que se sienten y visten como niñas3, para que normalicen en sus mentes este comportamiento.

También se enfatiza en las parejas del mismo sexo como una situación natural4.

En Canadá, la Ley 94 de 2023, crea zonas de seguridad para la comunidad 2SLGBTQI+5 para realizar sus actividades, incluyendo los shows Drag (show de trasvestis) y estar protegidos de amenazas y discriminacones. Esta Ley creó controversia porque contravenir estas zonas implica una multa de 25,000.00 dólares canadienses.

Lo interesante de esta Ley es que el gobierno puede designar una escuela pública como una zona de seguridad; por lo tanto, los niños y adolescentes están expuestos a las actividades de dicha comunidad, eso incluye las lecturas de cuentos con fuerte carga ideológica a los alumnos de primaria.

En varios países consideran a las escuelas como lugares seguros donde los niños y adolescentes pueden vivir su identidad de género preferida sin que sus padres se lo impidan. De hecho, consideran a los padres como los acosadores y culpables6 de obligar a los niños a comportarse con “roles” según su sexo de nacimiento.

En California, Estados Unidos, el Departamento de Educación del estado considera en su Marco de Educación para la Salud, como “abuso espiritual” que los padres obligen a los niños a adherirse a rígidos roles de género7. Es decir, mezclan la oposición por principios religiosos con la obligación de roles tradicionales.

Pero las legislaciones no solo influyen en la educación sino en la salud. Existe una ley en Estados Unidos que obliga indirectamente a las aseguradoras a cubrir los tratamientos8 de bloqueo de hormonas y cirugías. 

Además existe una estrategia para evitar que los padres no participen en la toma de decisión de estos tratamientos. Si lo hacen, los terapeutas presionan a los padres asustándolos con la posibilidad de que el menor se suicide si no se le deja “ser quien quiere ser” y muchas veces consiguen persuadirlos.

Con este marco los niños y adolescentes no tienen otra opción que asumir como normal la diversidad de género y oponerse a toda opinión “transfóbica” que se cruce en su camino. Los padres de familia lo viven con sus hijos.

Revisemos los principales daños.

En niños9
En la infancia, se desarrolla el aprendizaje, el pensamiento,
la motricidad fina y gruesa, la socialización, las emociones, el habla y lenguaje, en otras palabras, se sientan las bases para el desarrollo integral de la persona.

La educación sexual en esta etapa es muy orientada a preparar el terreno para la educación en el amor, en el respeto y cariño, el pudor y su autoestima.

Aun no es el momento del despertar de su sexualidad. Incluso las hormonas que activan este desarrollo no han iniciado su labor10

Insistir en un derecho al disfrute de la sexualidad como la IDG insiste, es un atentado a su salud mental porque no estan listos para procesar ni física ni emocionalmente un sentimiento de carácter erótico.

Al contrario, se consigue que sientan incomodidad de sus partes genitales. Si bien, el conocimiento de su cuerpo es labor de padres y educadores, la educación sexual apropiada exige un ritmo acorde a la edad del menor. 

Los países que adoptan la IDG por considerarlo progreso, fomentan que los niños tienen derechos de “vivir su sexualidad plenamente”11.
¿Perdón? Que alguien me explique12. Nadie va a vivir plenamente su sexualidad si no practica el sexo. Irónicamente los mismos promotores de esta postura no aceptan que se les critique por promover la pedofilia. Pero ellos mismos lo sugieren basados en el “derecho” del niño a tener sexo consentido.

Proponer a los niños, incluso a los más pequeños que puedes “sentirte” y vestirte de otro sexo o aspirar a “ser” de otro “género” es un abuso contra los niños, según el artículo 1913 de la Convención sobre los derechos del niño.

En esta etapa del desarrollo el niño aun no comprende el alcance de ello para el futuro. En Inclusive, la presión que se ejerce por proponerle a un menor de 10 años 

En el ámbito cristiano, adoctrinar a un menor es tocar un territorio sagrado. La inocencia de un menor es un bien a cuidar y preservar14.

Si esto no fuera suficiente debemos advertir el fuerte contenido de diversidad de género que ha invadido las caricaturas, los cuentos y las películas. Sería interminable la lista y amerita un capítulo entero.

Esta estrategia es una deconstrucción de la cultura, pues alterando el significado original de los cuentos clásicos, cargados de significado cristiano15, valores y principios morales, se pretende eliminar estos modelos en la construcción de la personalidad del menor.

Por último, oponerse a las alternativas de diversidad de género que se quieren imponer a los niños, sobretodo cuando el niño es víctima de dicha confusión o está pasando por un vacío emocional producto de la ausencia paterna y comienzan a identificarse como del otro sexo, es considerado una intromisión en los derechos del niño.

Esto es una malísima interpretación de los Derechos del Niño relacionados a la escucha y ponderación de sus opiniones16 (Art.12). No todos los deseos de los chicos deben ser cumplidos por la sociedad.No podemos convertir la lluvia en chocolate17.

Como dice el Dr. Kenneth Zucker:

“Solo porque los niños pequeños digan algo no significa necesariamente que usted lo deba aceptar o que eso sea cierto o que sean los mejores intereses para el niño.18

Adolescentes
Los adolescentes viven muchos cambios físicos y emocionales, los cuales son necesarios en su preparación para la vida adulta.

En esta etapa se desarrolla la solidaridad y la empatía. Ellos ven a la comunidad LGTBI+ atacada por los padres y la sociedad “tradicionalista”. Se convierte en otra razón, entre muchas, para contradecir a los padres. 

Como están en búsqueda de modelos (femeninos y/o masculinos), la farándula y los influencersgays y lesbianas encuentran terreno fértil en los preadolescentes y adolescentes. Permea su relato y su narrativa es aceptada. Los adolescentes se convierten en los más férreos defensores empáticos de la comunidad LGTBI+, aunque ellos no tengan problemas de disforia o los vacíos profundos de los que anteriormente hemos hablado. 

Sin embargo, quienes sí han tenido estos vacíos y lidian con ello, cuando la escuela les propone la opción de sentirse cómodos si “se sienten” de otro sexo o le atrae el mismo sexo, experimentan atención y protección. Pero la escuela se vuelve cómplice de los daños a la salud del menor.

En estos casos la escuela deja de ser la promotora de la razón, de la verdad, de la ciencia; al contrario, se convierte en activista ideológica y los alumnos no se instruyen con la verdad objetiva dentro de su proceso educativo. 

Estamos formando ciudadanos eminentemente emocionales que interpretan únicamente verdades subjetivas.

Por la característica volátil de la adolescencia y los cuestionamientos típicos de su edad, a la búsqueda de “¿quien soy yo?” se le agrega el “¿qué soy yo?”. ¿Soy realmente hombre/mujer)? ¿Y si no fuera así?

La típica inseguridad del adolescente respecto a sí mismo ahora es aderezada con una aguda inquietud basada en el odio a su cuerpo, porque tal vez es el sexo equivocado.  

Sus fracasos con el sexo opuesto son alentados por la idea de que tal vez está en el bando equivocado19

Si bien, hemos explicado que la AMS es causada por los vacíos homo-emocionales de la infancia, existe una presión social, mediática y escolar para considerar este estilo de vida. 

Por otro lado, los adolescentes al ser muy frágiles emocionalmente y convierten el inicio de un posible trastorno en una identidad20: anorexia, bulimia, cortes a sus brazos, depresión, son cartas de presentación entre los chicos. Los convierte en parte de algo.

En muchos manuales de orientanción docente se establece que la exploración de las partes íntimas no solo es normal, sino un derecho a sentir dicho placer21. La primera parte es cierta, el niño y preadolescente siente curiosidad por su cuerpo, pero llevar esta actividad a nivel de un “derecho” del adolescente es validar una puerta hacia la adicción de la pornografía, (considerada como la gran pandemia oculta), o al inicio de una vida sexual activa.

Esta adicción que comienza en la pubertad puede llegar a ser un problema hasta la edad adulta22.

Los trans
Anteriormente explicamos las complicaciones físicas de los tratamientos de bloqueos hormonales, pero hay más daños en los niños y adolescentes que inician o han realizado la “transición”. 

Según lo expresan las mismas personas que han experimentado los bloqueos hormonales23, el tratamiento genera adicción. En niñas, la testosterona calma sus ansiedades, les da una sensación de alivio temporal, de energía y euforia, pero luego se va. Y viene la irritabilidad, la depresión y los trastornos alimenticios. 

Dependiendo del entorno social, el adolescente que transiciona es premiado con cientos de likes en sus redes o puede ser mal visto en su localidad. Generalmente su refugio son sus seguidores en las redes, pues los considera su zona segura.

El adolescente trans encuentra en sus pares trans una especie de secta, que al principio le cuidarán, pero luego se convertirán en su centinela, vigilarán su comportamiento en las redes, su lenguaje y si en algún momento tiene dudas sobre su transición y quiere “detransicionar” será tratado como disidente.

La realidad es que la transición hacia el otro sexo no “cura” la disforia de género, por el contrario agudiza la depresión, propicia el uso de drogas y aumenta los intentos de suicidio24.

Si bien la mayoría de adolescentes con AMS son varones, la mayoría de adolescentes que transiciona son chicas. Muchas están retrocediendo. Se llaman detransicionados. El proyecto Pique Resilience25 lo forman chicas que aun con la voz varonil, producto de los bloqueos, cuentan sus experiencias para prevenir a otros de los efectos dañinos de la transición.

Estas voces debemos escuchar. Ellas reclaman que como sociedad nos olvidamos de defender sus verdaderos derechos. A no ser abusadas física y mentalmente. A no ser lavadas de su cerebro por ideologías que no las pidieron en la escuela. 

Ellas difícilmente gozarán su sexualidad como tanto lo dicen los manuales de la mal llamada Educación Sexual Integral (ESI). Ni coito, ni orgasmo, ni experiencia fisica unitiva con la pareja. Es el contrasentido de la ESI pues coloca el transgénero como una nueva normalidad.

Lo que no se les dice a los adolecentes cuando les dicen que la disforia de género se quita con la transición, es que renunciarán para siempre del goce pleno de una vida sexual sana. Su temprana madurez no les hace comprender las implicaciones a largo plazo. 

Las detransicionadas culpan incluso a los propios padres de no haberles cuidado, de haberse dejado llevar por los deseos de un menor de edad. Reclaman que no las defendieron. Ni de ellas mismas y sus caprichos, como lo debe hacer un padre o un maestro.

Concluyendo ¿De quién debemos defender a los niños y adolescentes?

De los maestros que creen estar obrando bien ofreciendo ideologías sin sustento en las aulas.

De los padres que creen estar a la moda, siendo “open mind”, “gay friendly”. 

De los terapeutas que hacen mal en reafirmar la autopercepción del niño o adolescente.

De las organizaciones médicas que hacen mal en obligar a los gremios de la salud a adoptar la “afirmación de género”.

De los estudiantes de la salud y psicología por aceptar la diversidad de género como algo normal. 

De los contenidos ideologizados en las plataformas de streaming, series, documentales, caricaturas, comedias.

De la adicción a la testosterona.

De la adicción a la pornografía.

Del celular 24/7 que permite la realidad ficticia, el acoso, las adicciones, las reafirmaciones superficiales, el lavado de cerebro, la deconstrucción del lenguaje, del stress constante.

De los legisladores que creen que las leyes progresistas son un beneficio cuando en realidad son un daño.

De los gobiernos que se acoplan a las agendas externas para obtener un préstamo internacional.

De los organismos internacionales que sobreponen sus agendas a los estados. 

De los religiosos confundidos que han mal entendido el término acogida.

Inclusive, los padres deben defender a sus hijos, de ellos mismos; del propio daño que ellos están haciendose a sí mismos.


  1. Hazte Oir (2016). ¿Sabes lo que quieren enseñarle a tu hijo en el colegio? Las leyes de adoctrinamiento sexual. España. pp. 12-17. http://www.aelatina.org/wp-content/uploads/2020/11/Libro-Leyes-de-Adoctrinamiento-Sexual.pdf ↩︎
  2. Instituto de la Mujer y para la Igualdad de Oportunidades. (2015). Abrazar la diversidad: propuestas para una educación libre. pp. 75-115. http://goo.gl/B734Zp ↩︎
  3. Federación de la Enseñanza de CCOO. (2015) Somos como Somos: 12 Inclusiones, 12 Transformaciones. p. 15. https://docta.ucm.es/entities/publication/2fee2edc-b4ff-4c71-ae0f-e918e0eb2ae4 ↩︎
  4. Nichols L. et al.  (2014) Nicolás tiene dos papás. MOVILH  https://issuu.com/movilh/docs/nicolas_tiene_dos_pap__s#google_vignette ↩︎
  5. 2S: dos espíritus; L: lesbianas; G: gays; B: bisexual; T: Transexual; Q: Queer; I: Intersexual; + todos los demás (pansexuales, asexuales, no binarios, fluidos, etc.) ↩︎
  6. Shrier, Abigail. 2020. Un daño irreversible. La locura transgénero que seduce a nuestras hijas. DEUSTO. ↩︎
  7. California Board of Education (2019). Health Education Framework Chapter 6: Grades Nine Through Twelve. https://edsource.org/wp-content/uploads/2018/12/hefwch6gr9-12.pdf ↩︎
  8. Section 1557, 45 C.F.R. 92.207, U.S. Code of Federal Regulations. (2020) https://www.ecfr.gov/current/title-45/subtitle-A/subchapter-A/part-92 ↩︎
  9. Niños, según la RAE es un término inclusivo que abarca a los hombres y mujeres. Es un sustantivo epiceno cuya función es diferenciarse de otros de su clase: adultos, ancianos, adolescentes. No es función del sustantivo epiceno diferenciarse por sexo. ↩︎
  10. Del Giudice, Marco. (2018) Middle Childhood: An Evolutionary-Developmental Synthesis. Handbook of Life Course Health Development. https://www.researchgate.net/figure/Developmental-trajectories-of-human-growth-and-sex-hormones-production-from-conception_fig1_321330311 ↩︎
  11. Instituto Colombiano de Bienestar Familiar. (2016) Construyendo juntos entornos protectores. Derechos sexuales reproductivos.p. 12. https://salutsexual.sidastudi.org/es/registro/a53b7fb35a776666015bafca153f0636 ↩︎
  12. Derbez, Eugenio. (2002) Hans Pujenhaimer. (frase de personaje) XHDRBZ. ↩︎
  13. UNICEF. Convención sobre los derechos del niño. https://www.unicef.org/es/convencion-derechos-nino ↩︎
  14. La Sagrada Biblia. Traducción de los originales, Juan Straubinger. Mc 9, 42 ↩︎
  15. Blanco, Diego. Érase una vez el Evangelio en los cuentos. Encuentro. https://edicionesencuentro.com/libro/erase-una-vez-el-evangelio-en-los-cuentos/ ↩︎
  16. UNICEF. Convención sobre los derechos del niño. p. 13. https://www.unicef.org/es/convencion-derechos-nino. ↩︎
  17. Leach, Sheryl. (1992). Barney y sus amigos. (Serie de televisión) ↩︎
  18. BBC2 (2017). This World_Transgender Kids BBC2. (Vimeo) https://vimeo.com/217950594 ↩︎
  19. Iturrieta Muñoz, Pablo. (2020) Atrapado en el cuerpo equivocado. La ideología de género frente a la ciencia y la filosofía. Metanoia Press. ↩︎
  20. Helena, (2019) How mental illness becomes identity: Tumblr, a Callout Post, Part 2. 4thWavenow. https://4thwavenow.com/2019/08/13/how-mental-illnesses-become-identities-tumblr-a-callout-post-part-2/ ↩︎
  21. Instituto Colombiano de Bienestar Familiar. (2016) Construyendo juntos entornos protectores. Derechos sexuales reproductivos.pp. 14-15. https://salutsexual.sidastudi.org/es/registro/a53b7fb35a776666015bafca153f0636 ↩︎
  22. Bella Dreams Films. Dark Adiction (Documental) https://darkaddiction.org ↩︎
  23. Shrier, Abigail. 2020. Un daño irreversible. La locura transgénero que seduce a nuestras hijas. DEUSTO.pp. 250-271. ↩︎
  24. UCLA. (2023) More than 40% of transgender adults in the US have attempted suicide. School of Law Williams Institute. https://williamsinstitute.law.ucla.edu/press/transpop-suicide-press-release/ ↩︎
  25. https://www.piqueresproject.com ↩︎

Este artículo es parte del capítulo 3.
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